Se le acabó el corrido al Mazatlán FC que no pudo con los Tigres y perdió su duelo de la Jornada 10 al caer 3-2 en el Estadio Kraken. Los sinaloenses venían de vencer a Chivas, los felinos solamente tenían 1 triunfo de visita y supieron salir con el triunfo.
Los actuales campeones de la Liga MX dieron descanso a algunos elementos que ingresaron en el complemento y le cambiaron la cara a los Tigres.
Los felinos se presentaron con algunas modificaciones, entre ellas la titularidad de Nicolás Ibáñez. El argentino comenzó muy movido y tuvo varias desde el arranque.
Ricardo Rodríguez le atajó la primera al minuto 2, posteriormente el sudamericano intentó de nuevo al 16′ y otra vez le desviaron a tiro de esquina. En el cobro, Sebastián Córdova la tuvo de cabeza y no supo darle camino de portería.
El marcador se abrió al 23′, y pegó primero Mazatlán, cuando Josué Colman dejó en Nicolás Benedetti, quien dentro del área en lugar de definir cedió en Ake Loba y el africano no falló y puso el 1-0. Tigres respondió y al 24′ Ibáñez se pusp frente a Rodríguez y de nuevo falló.
Antes del descanso, Diego Lainez hizo el 1-1 mediante un golazo. Recibió pasado el medio campo, condujo y se fue metiendo de a poco al área y definió cruzado para empatar el marcador.
Ya en la segunda mitad, a Ibáñez le hizo justicia tanto esfuerzo y de cabeza hizo el 2-1 al 55′. Fue un buen centro de Lainez y el atacante remató de cabeza, aunque el balón se le fue al portero.
Ozziel Herrera hizo el 3-1 al 65′ con apenas unos minutos en la cancha. Ingresó al 63′ por Lainez y a los 2 minutos aprovechó el pase de André- pierre Gignac y barriéndose aumentó la ventaja.
La anotación mató a los Cañoneros que intentaron con el tiro de Édgar Yoel Bárcenas que le atajó Nahuel Guzmán.
Fue al 88′ cuando Mazatlán se acercó en el marcador ya que Francisco Venegas anotó al 88′, tras una buena pared con Luis Amarilla.
El duelo parecía tenía vida para Mazatlan, pero no le alcanzó para empatar y dejó ir puntos en casa, ya que Bárcenas en la última del encuentro disparó por un lado y vino el silbatazo final.