McLaughlin pulveriza su récord mundial de 400m vallas

McLaughlin pulveriza su récord mundial de 400m vallas

La superestrella estadunidense Sydney McLaughlin aniquiló su propio récord mundial de los 400 metros vallas con una estratosférica marca de 50.68 segundos para conquistar su primer oro en un Mundial de atletismo.

McLaughlin batió el primer récord mundial de Eugene-2022, primer campeonato del Mundo celebrado en territorio estadunidense, en el octavo y antepenúltimo día de competencias.

El público del Hayward Field sabía mejor que nadie que se avecinaba una exhibición de McLaughlin, a quien ya han visto batir el récord mundial en tres ocasiones en los últimos 13 meses.

La vallista no defraudó y con sus asombrosos 50.68 segundos superó por más de siete décimas su anterior mejor marca (51.41), impuesta en este mismo escenario el pasado 25 de junio en las pruebas de clasificación estadounidenses.

«Es irreal», alcanzó a decir una fatigada y emocionada McLaughlin sentada en la pista. 

Estoy muy agradecida por tener estos aficionados apoyando al equipo estadunidense«, dijo la vigente campeona olímpica entre la ovación de sus seguidores.

Observando a lo lejos la exhibición de McLaughlin, la holandesa Femke Bol fue plata con 52.27 y la estadunidense Dalilah Muhammad, que defendía el título del Mundial de Doha-2019, bronce con 53.13.

Las mismas tres medallistas coparon hace un año el podio de los Juegos de Tokio, con Muhammad haciéndose con la plata en aquella ocasión y Bol con el bronce.

«EL CIELO ES EL LÍMITE»

McLaughlin comenzó a batir récords en el atletismo desde muy pequeña. Plusmarquista mundial cadete y júnior, la vallista procede de una familia de corredores.

Su hermano Taylor fue subcampeón del mundo júnior de 400 metros vallas en 2016 y su padre, Willie, fue semifinalista en los 400 metros en las pruebas olímpicas de Estados Unidos en 1984.

La joven prodigio apareció en la escena internacional en los Juegos de Rio-2016, pocos días después de su 17º cumpleaños, pero fue apeada en las semifinales. 

Su llegada en 2020 a la estructura que dirige el célebre Bob Kersee, ex entrenador de su esposa Jackie Joyner-Kersee y su cuarto técnico en cinco años, marcó un punto de inflexión para esta joya del atletismo estadounidense.

Ante su incontestable dominio de la prueba, McLaughlin reconoció el viernes que ha analizado un posible cambio de disciplina.

«Bobby y yo hemos hablado de la posibilidad de buscar otros eventos», admitió McLaughlin en la rueda de prensa posterior a la final. «Pero no sé si eso va a ocurrir. Al final de la temporada decidiremos si queremos cambiar de prueba o seguir con los 400 metros vallas». 

Cuando se le preguntó si el cambio podría ser a los 400 metros lisos, McLaughlin respondió: «Creo que todo es posible… pero lo dejo en manos de mi entrenador, Bobby».

Mi entrenador cree que se puede hacer mucho más», señaló. «El cielo es el límite, seguro«. 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *