El Wolverhampton vio cortada su buena racha de sus triunfos al hilo al caer 1-0 con el Bournemouth, en duelo correspondiente a la Jornada 24 de la Liga Premier.
Los Wolves venían de ganarle al Liverpool y al Southampton y no lograron seguir con el buen momento y cayeron en casa.
Raúl Jiménez de nuevo fue elemento de banca y fue enviado a la cancha al minuto 77, en la nueva derrota de su equipo, que por más que intentó, no pudo ganar.
Y es que los Wolves tuvieron varias de gol, más no hubo tino.
Pablo Sarabia intentó al minuto 21, al recibir de Matheus Cunha y remató con la pierna izquierda, que puso cerca de la portería visitante.
Cunha tuvo la siguiente al 26’ con un cabezazo a centro de Adama Traoré y aunque intentó dale dirección la dejó ir; misma suerte que tuvo al 31’ ahora con un derechazo que se escapó.
Antes de finalizar la primera mitad, Joao Moutinho recibió de Nelson Semedo y golpeó de cabeza, mandando el balón muy, muy por arriba.
Iniciando la segunda mitad, y cuando se esperaba mayor peligro de los Wolves, el Bournemouth pegó y lo hizo al 50’, cuando Marcus Tavernier desvió con la pierna un balón que cruzó, Dominic Solanke en el área y así poner el 1-0 para la visita.
El gol movió los planes de Julen Lopetegui que le intentó y no pudo.
Cunha hizo otro cabezazo al 53’ y la oportunidad se escurrió ante el poco tino de los Wolves.
Jiménez fue enviado a la cancha al 77’ por Traoré para ver si lograba anotar su primer gol de la temporada, más no hubo éxito. En la parte final, Craig Dawson intentó con otro cabezazo que no hizo daño.
Fue la derrota 12 para los Wolves que no pueden mantener una regularidad y se mantienen en la parte baja de la tabla de Premier League.