Pese a que transcurrieron diez días de su finalización, el Mundial de Qatar 2022 sigue dejando voces de algunos protagonistas importantes. La Copa del Mundo fue para la selección argentina un camino lleno de desafíos y dificultades.
Una de esas vallas estuvo representada en el seleccionado de Países Bajos.
El equipo de Scaloni superó ese cruce por los cuartos de final recién en la tanda de los penales y uno de los que habló sobre esa definición fue Virgil Van Dijk, uno de los grandes referentes del equipo de Van Gaal. El zaguero central se refirió a su penal fallado y cómo vivió las horas y los días posteriores.
Argentina y Países Bajos protagonizaron uno de los duelos más calientes de la Copa del Mundo. Tras los 90 minutos reglamentarios, el partido finalizó 2 a 2 con el empate agónico del equipo neerlandés. Y luego de los 30 minutos de alargue sin novedades en el marcador, hubo que definir el pase a las semifinales desde los doce pasos. Quien comenzó con la serie fue el capitán de Países Bajos: en declaraciones a Viplay, Van Dijk expresó el dolor por el que atravesó luego de que su remate fuera atajado por Emiliano Martínez.
“No pude dormir durante dos días después de ese partido”, confesó el defensor, en referencia a ese disparo a la derecha de Dibu, que adivinó la intención y voló para desatar el primer festejo en los penales entre los jugadores albicelestes. Una situación que terminó siendo trascendental para que los de Scaloni impidieran que Países Bajos arranque la serie en ventaja.
Además, el jugador de Liverpool expresó: “Estás tan cerca, incluso después de ir perdiendo 2-0. Desafortunadamente, fallas un penal importante. Me duele mucho, tuve una tarde y noche muy duras”, reveló. Y por último, agregó: “Me desconecté del fútbol durante un tiempo y aproveché para estar con la familia. Es lo más importante en la vida”.
El penal que Martínez le tapó a Van Dijk
Argentina y Países Bajos animaron un partido de mucha tensión. El árbitro español Mateu Lahoz no supo llevar las riendas del encuentro y pareció agitar aun más la situación. De hecho, los números de su fallida actuación son impresionantes: sacó ocho tarjetas amarillas para los jugadores argentinos –Paredes, Marcos Acuña, Nicolás Otamendi, Cristian Romero, Lisandro Martínez, Gonzalo Montiel, Germán Pezzella y Lionel Messi– y seis para los neerlandeses, más una expulsión de Denzel Dumfries por la segunda amonestación, aplicada en plena tanda de penales por haber ido a molestar a uno de los ejecutantes albicelestes.
En rigor, desde que se “picó” el partido hasta que los equipos se fueron a los vestuarios, ya nada resultó igual. La imagen del desenlace, con Di María, Otamendi, Paredes, Mac Allister, Pezzella y Montiel celebrando en la cara de los adversarios en el círculo, cuando iniciaban su carrera festiva hacia donde estaban Dibu y Lautaro Martínez, fue el reflejo de la tensión que se vivió en un cuarto de final inesperadamente caliente.
Y luego, la frase de Lionel Messi. El capitán argentino estaba por empezar un diálogo con TyC Sports cuando, inesperadamente, estalló: “¿Qué mirás, bobo?, Andá para allá, bobo”. El periodista Gastón Edul le preguntaba: ”¿Quedaste un poco caliente por el final?”, pero el crack rosarino se mantenía a mil revoluciones..
Messi tardó varios segundos en responder, mientras la tensión podía palparse en el ambiente. De inmediato la reacción se hizo viral en las redes: ¿a quién iba a dirigido su mensaje desafiante? La respuesta llegó minutos después: testigos de la escena en las entrañas del estadio Lusail relataron que el destinatario era ni más ni menos que Wout Weghorst, el delantero holandés que entró en el minuto 78 del partido y marcó los dos goles de su equipo.