MELBOURNE, Australia (AP) — Andy Murray empató su encuentro en el Abierto de Australia con un set para cada uno y se detuvo en la esquina del Margaret Court Arena con sus manos en la cadera y viendo hacia las gradas. Los espectadores saltaban y gritaban levando el puño y ondeando banderas azules y blancas de Escocia.
Todos esos aficionados y hasta el propio Murray podrían haber pensando en ese momento: “¡Aquí vamos de nuevo!”
Pero no hubo un emocionante duelo de cinco sets para Murray y sus seguidores. Ningún final después de media noche. Ninguna clásica voltereta. Ningún triunfo. No, el desgaste de sus dos interminables actuaciones anteriores simplemente desgastaron al tenista de 35 años y su cadera artificial. Murray terminó con una serie de ampollas y dolores de espalda en la derrota por 6-1, 6-7 (7), 6-3, 6-4 ante Roberto Bautista Agut en la tercera ronda.
“No siempre puedes controlar el final. No puedes controlar lo bien que vas a jugar o el resultado. Puedes controlar el esfuerzo que pones en ello y lo di todo en los últimos tres encuentros. Estoy orgulloso de ello”, advirtió Murray, quien ha sido cinco veces finalista en Melbourne Park y ha conquistado tres títulos de Grand Slam. “Pero sí, estoy decepcionado”.
Este duelo terminó en apenas tres horas y media, que pareció demasiado corto comparado a sus dos exhaustivos encuentros que tomaron más de 10 horas y media esta semana: superó a Matteo Berrettini (13) en cinco sets el martes en la primera ronda y posteriormente eliminó a Thanasi Kokkinakis en cinco sets en la segunda ronda, en un duelo que comenzó el jueves en la noche y concluyó el viernes poco después de las 4a.m.
Murray durmió entre las 6a.m. y 9a.m., regresó al recinto para que le drenaran las ampollas y volvió al hotel para tomar una siesta antes de presentarse en la cancha para darle a la bola por alrededor de 15 minutos.
Tuvo un lento comienzo ante Bautista Agut el sábado, empujó para llevarse el segundo set, pero se vino abajo posteriormente. Al terminar el encuentro, Murray recibió una ovación como despedida.
“Hoy Andy recibió mucho amor”, indicó Bautista Agut (24) tras su victoria. “Espero que en la siguiente ronda haya un poco para mí”.
Los dos se han enfrentado seis veces, incluyendo la victoria de Bautista Agut en Australia en 2019 un año después de la primera de dos operaciones de cadera de Murray.
Desde entonces se ha preguntando si vale la pena el trabajo para volver a ser competitivo. Tras la derrota de este sábado, le preguntaron cómo le hacen sentir momentos como los de esta semana.
“Me gustaría despedirme jugando este tipo de tenis, compitiendo con los mejores del mundo en los eventos más grandes y haciéndome justicia”, reconoció Murray.