MIAMI (AP) — Los golpes de Jannik Sinner a ras de piso suelen viajar a más de 80 millas (128 kilómetros) por hora. Es una velocidad impresionante, incluso para los estándares del tenis profesional.
El viernes, el jovencito italiano demostró también rapidez para emular logros de grandes tenistas en el Abierto de Miami.
Sinner, de 19 años y apenas en su tercer torneo a nivel ATP, avanzó a la final del Abierto de Miami al derrotar 5-7, 6-4, 6-4 al español Roberto Bautista Agut.
Sinner se convirtió en el cuarto adolescente en avanzar a la final en sencillos de hombres en Miami, sumándose a Novak Djokovic, Rafael Nadal y Andre Agassi.
“Es algo agradable, pero no significa nada”, comentó Sinner. “El camino para que tu nombre sea famoso es muy largo. Esto no se logra en una semana ni en un torneo”.
En la segunda semifinal, el ruso y cuarto preclasificado Andrey Rublev se medirá con el polaco Hubert Hurkacz (26).
Djokovic, Nadal y Roger Federer decidieron no participar en el torneo, lo que abrió oportunidades para los cuatro semifinalistas. Todos ellos tratan de ganar por primera vez un título de Masters 1000 de la ATP.ADVERTISEMENT
La número uno del mundo Ash Barty buscará su segundo título consecutivo en Miami este sábado en contra de la canadiense Bianca Andreescu, quien venció a la griega Maria Sakkari en un choque de tres sets que terminó a la 1:35 de la madrugada del viernes.
“Me encanta el desafío”, dijo Andreescu. “Y sé que ella va a desafiarme el sábado”.
Sinner, 21er preclasificado, ha mejorado en su ubicación en el ranking desde el lugar 78 en que se encontraba al inicio del año pasado. Llamó la atención al colarse a los cuartos de final en su debut en el Abierto de Francia en septiembre y se calcula que ascenderá al menos hasta el 24to puesto la próxima semana.
Su duelo con Bautista Agut, séptimo preclasificado, era un contraste en estilos. Sinner recurrió a su potencia desde el fondo hasta desgastar gradualmente a su rival español.
Sinner dio un paso importante hacia la victoria cuando el segundo parcial estaba igualado 3-3. Bautista Agut permitió que una pelota pasara en break point, y ésta aterrizó sobre la línea.
“Pensé que esa bola saldría, y tocó la línea por un milímetro”, lamentó el español. “El tenis es una locura a veces, ¿no? Una pelota puede marcar una gran diferencia en el partido”.
