SEVILLA, España (AP) — Apenas una semana atrás, España vivía momentos de angustia, temiendo que su participación en el Campeonato Europeo corría peligro.
El capitán Sergio Busquets dio positivo por coronavirus y el seleccionado nacional afrontaba el riesgo de un brote de COVID-19 en sus filas.
Busquets tuvo que abandonar la concentración, mientras que el resto del plantel quedó aislado. Todos debieron someterse a múltiples pruebas. El técnico Luis Enrique tuvo que citar apuradamente a un equipo de emergencia en caso que se detectasen más positivos. El último amistoso debió disputarse con jugadores de la Sub21.
El temor creció cuando un segundo jugador, el defensor Diego Llorente, arrojó positivo. Más jugadores debieron suspender sus vacaciones para incorporarse a la “burbuja paralela”.
Era una situación alarmante para la Roja previo a un torneo que fue aplazado un año por la pandemia.
Pero la normalidad ha vuelto en cierto sentido en España con miras a su debut el lunes contra Suecia por el Grupo E en Sevilla.
Poco a poco, las buenas noticias se apilaron.
El resultado de Llorente acabó siendo un falso positivo. El gobierno vacunó a todo el plantel. Los jugadores volvieron a entrenar juntos tras recibir resultados negativos.
España tendrá a casi todo su personal cuando reciba a los suecos en el estadio de La Cartuja.
“Todos los que estamos aquí vemos el vaso medio lleno”, dijo Llorente. “Todas estas cosas nos han hecho más fuertes como grupo y como equipo. A nivel mental te puede ayudar a afrontar estos partidos. Todo saldrá bien si remamos en la misma dirección y ésa es la lección que debemos sacar de esta semana”.
Suecia también ha tenido que lidiar con contratiempos por el coronavirus. El extremo Dejan Kulusevski y el volante Mattias Svanberg dieron positivo la semana pasada y han quedado en aislamiento.
No podrán jugar el lunes, al igual que Busquets. El volante del Barcelona había quedado como el capitán del seleccionado luego que Luis Enrique optó por no convocar a Sergio Ramos tras una temporada plagada por lesiones.
Suecia también echará de menos a un veterano talismán. Zlatan Ibrahimovic, quien en marzo había vuelto a la selección tras un retiro de cinco años, fue descartado de la Euro 2020 por una lesión en la rodilla.
El ataque sueco tendrá como estandarte a Alexander Isak, un jugador de 21 años que milita en la Real Sociedad de la liga española.
“Ellos son los favoritos, pero estoy seguro de que nos respetan tanto como nosotros a ellos”, dijo Isak.
Alrededor de 16.000 espectadores podrán ingresar a La Cartuja, donde España también enfrentará a Polonia y Eslovaquia en la fase de grupos. Además, La Cartuja tiene previsto un duelo de cuartos de final.
Luis Enrique confía que el susto provocado por el coronavirus quedó atrás.
“Espero que no haya ningún caso más en ninguna selección”, dijo. “Espero que se pueda ver un buen espectáculo. La gente quiere volver a los estadios y recuperar de nuevo la normalidad”.
