Los Diablos Rojos del Toluca volvieron a sufrir en el Infierno y sin embargo lograron rescatar un punto ante Necaxa que apenas y aprovechó su ventaja numérica en el campo del Estadio Nemesio Diez, donde todo quedó en un empate 1-1.
El sufrimiento de los Diablos comenzó en el primer tiempo por la dificultad de encontrar espacios para anotar un gol.
Sin embargo, la parte más difícil llegó cuando Haret Ortega se fue expulsado a los 34 minutos por una plancha sobre Alan Medina. La jugada tuvo que ser revisada en el VAR por César Ramos Palazuelos, pero finalmente sí le mostró la roja al defensa.
Así fue como los Diablos tuvieron que hacer un mayor esfuerzo físico para tapar esta baja, pero no pudieron lograr evitar un gol en contra. Los Rayos lograron armar una jugada de peligro a los 52 minutos gracias a un centro de Rodrigo Aguirre para Alejandro Zendejas que remató a gol para el 0-1.
Parecía que se venía una pesadilla, en especial porque al 54’ el técnico Hernán Cristante se fue expulsado por reclamos al árbitro. El técnico no salía expulsado desde febrero de 2019 cuando lo echaron de un partido ante León.
Sin embargo, los Diablos mantuvieron la concentración y un minuto después los escarlatas mandaron un centro al área y el defensa Óscar Vanegas conectó de cabeza para conseguir el 1-1 que despertó a los escarlatas.
Hubo mucho desgaste físico de ambos clubes, pero ya no cayeron más goles pese a que no hubo una renuncia a tratar de ganar el partido.
