El pasado 24 de febrero, el golfista estadounidense Tiger Woods cimbró al mundo del deporte tras conocerse que había sufrido un accidente automovilístico en los suburbios cercanos a Los Angeles, por que tuvo que ser trasladado de emergencia a un hospital para ser operado.
Un par de semanas después, el histórico golfista hacía sus primeras declaraciones en las que agradecía el apoyo recibido tras el percance y aseguraba que pronto estaría de regreso.
“Feliz de anunciarles que regresaré a casa y continuaré mi recuperación.
Estoy muy agradecido de las muestras de apoyo y aliento que he recibido en las últimas semanas», publicó en aquella ocasión el atleta, quien más temprano que tarde cumplió sus palabras y el viernes posteó en su cuenta de Instagram una imagen en la que se lo puede ver caminando apoyándose en un par de muletas y bastante sonriente.
Woods fue sometido a una larga cirugía en la parte inferior de la pierna derecha y el tobillo después de ser llevado al hospital.
Las lesiones adicionales de los huesos del pie y el tobillo se estabilizaron con una combinación de tornillos.
El trauma en el músculo y los tejidos blandos de la pierna requirieron la liberación quirúrgica de la cubierta del músculo para aliviar la presión debido al hinchazón.