ORLANDO, Florida, EE.UU. (AP) — Scottie Scheffler jugó el tipo de golf que tradicionalmente se necesita para ganar el Abierto de Estados Unidos y así se sintió en el Arnold Palmer Invitational el domingo en Bay Hill.
En otra ronda final que ofreció una de las más difíciles condiciones para anotar en cuatro décadas, Scheffler logró tiros clave para rescatar dos pares improbables, siguió con un par de putts retrasados y cerró con un par 72 para conseguir la victoria por un golpe.
Scheffler ahora tiene dos títulos del PGA Tour en el último mes, habiendo conseguido su primera victoria en el Abierto de Phoenix. Aquella fue ruidosa. Esta resultó estresante para quienes tenían una oportunidad de vencerlo.
El promedio de tarjetas fue de 75,48, una fracción menor que el año pasado. Solamente 10 jugadores terminaron el torneo por debajo de par.
Billy Horschel fue el último jugador con posibilidades de alcanzar a Scheffler con un birdie de 30 pies en el último hoyo que realmente nunca tuvo una oportunidad. Horschel firmó tarjeta de 75 golpes y empató en el segundo lugar con Tyrrell Hatton (69) y Viktor Hovland (74).
Hovland seguía empatado en el liderato hasta que tuvo problemas con una trampa de arena en el hoyo 17 y necesitó de dos putts desde 50 pies para un bogey. En busca de un birdie en el último hoyo para alcanzar a Scheffler, con quien estaba empatado, el noruego falló un tiro de 18 pies.
Hatton, quien ganó en Bay Hill hace dos años, logró siete birdies en un campo complicado.