Esta vez, las miradas adquirieron un tono distinto, fueron más recias, con ese gesto hosco porque al final tendrán que batirse en una ‘guerra’ arriba del cuadrilátero.
Emanuel «Vaquero» Navarrete vs. Óscar Valdez, por el título Superpluma de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en poder del nacido en San Juan Zitlaltepec, Estado de México.
Un combate añorado por varios amantes del boxeo, y un compromiso que apunta para ponerse entre los mejores de 2023, sobre todo, porque con dos peleadores aztecas arriba de un ensogado, casi el espectáculo está garantizado.
Y muchos ven un símil con aquel enfrentamiento en versión trilogía entre Erik «Terrible» Morales y Marco Antonio «Barreta» Barrera, pero enfocados en lo que será el ‘pleito’ en sí, porque más allá de que en el último cara a cara se dejó sentir ese ambiente bélico que todos han pregonado, las previas no fueron como las de aquellos personajes, sino más bien siempre en escenarios amables.
Mientras, y apegados al reglamento de las reyertas titulares, tanto el mexiquense como el de Nogales, Sonora, validaron su subida a la báscula, por lo que se declararon aptos para repartirse candela en la Desert Diamond Arena de Glendale, Arizona.
Como siempre, tipos profesionales, que se acatan a los modos y formas, ambos estuvieron en el límite de la categoría, y entonces son elegibles para su duelo de este sábado en territorio desértico estadounidense.
El monarca, Navarrete, quien hará la defensa de su cinto, paró la fiel de la romana en 130 libras; mientras, The King, el del Canelo Team, y por ende muy cercano a Saúl «Canelo» Álvarez, presentó 129.8, parejitos arriba de la balanza.
El primer golpe, uno que suele de pronto ser engorroso, está dado, se terminó la camaradería, y a lo que sigue, una guerra en el ring, porque hay dos mexicanos, y de esos de buena hechura.