La pandemia de COVID puso a pensar seriamente a la NFL sobre la sede del Super Bowl LVI este 2022, que está programado en el SoFi Bank Stadium de Los Ángeles y así se mantendrá, pero la liga reveló que mantuvo «pláticas con otras ciudades» para evaluar la posibilidad de mover el evento por la creciente ola del coronavirus en California.
De acuerdo a la cadena televisiva WFAA de Dallas, que citó a una fuente en la directiva de los Cowboys -la franquicia de futbol americano de la ciudad-, la NFL estuvo en comunicación con el propietario, Jerry Jones, para pensar en un «plan emergente» en caso de que los problemas con la COVID-19 persistieran en Los Ángeles.
Sin embargo, en un comunicado a la AFP, el portavoz de la NFL, Brian McCarthy, dijo que la liga seguía concentrada en organizar el juego en Los Ángeles como estaba planeado.
El condado de Los Ángeles reportó casi 45 mil nuevos casos durante el sábado y el domingo, tras un récord diario de 27 mil nuevas infecciones el viernes. El martes también se confirmaron otros 21 mil 790 casos