TOKIO (AP) — Uno de los peores errores, tal vez el más común, en los que puede caer un equipo de fútbol luego de una buena actuación es el de la autocomplacencia.
Alexis Vega lo sabe y por eso el delantero de la selección olímpica de México dijo que no piensan tomarse a la ligera el partido del domingo ante Japón, su segundo por la primera fase en Tokio 2020.
México se estrenó en el torneo masculino con una apabullante victoria 4-1 sobre Francia que lo coloca en la parte más alta del Grupo A, que completa Sudáfrica.
“Tenemos que seguir trabajando con la misma humildad. El sacrificio de cada uno de nosotros será fundamental”, dijo Vega en declaraciones al portal de la FIFA. “Va comenzando el torneo, no hemos ganado nada; sabemos que debemos tener los pies en la tierra para seguir cosechando porque venimos con la mentalidad de jugar seis partidos”.
México alcanzó la gloria máxima en el fútbol de Londres 2012, cuando contra los pronósticos venció a Brasil para quedarse con la medalla de oro. Hace cuatro años, en Río 2016, el equipo decepcionó y quedó fuera en la fase de grupos.
Pero el equipo dirigido por Jaime Lozano llegó a Tokio con un talentoso equipo en el que destaca Diego Lainez, del Betis de la Liga española, además del experimentado arquero Guillermo Ochoa, acompañados por talentosos jugadores menores de 24 años como Vega, Uriel Antuna y Sebastián Córdova.
“Nuestro sello es que somos muy intensos y presionamos bastante. Somos un equipo compacto que estamos en la misma sintonía; muy vertical, que le gusta contragolpear mucho y somos contundentes en la definición. Estamos muy motivados para hacer historia”, agregó Vega.
Japón inició el torneo con un triunfo de 1-0 sobre Sudáfrica, pero Vega no le pone mucha atención a eso.
“Va a ser el rival más complicado. Es el local y juega bastante bien al fútbol. Ya los hemos estado observando para ver cómo les podemos hacer daño. Estoy seguro de qué, si seguimos trabajando de la misma forma, va a ser un gran partido”.