La medalla de oro obtenida por Juan Diego García en el Parataekwondo de los Juegos de Tokio 2020 tiene toda la esencia de la escuela de una disciplina que -salvo en la más reciente cita olímpica- siempre dio preseas a México.
El chico, quien se mostró muy dominante durante toda la competencia de menos de 75 kilogramos y dio al país la séptima de oro en los XVI Juegos Paralímpicos, es entrenado por Jannet Alegría, quien fuera taekwondoína y participara en Londres 2012, certamen en el que se quedó muy cerca de las preseas, al perder el combate definitivo en punto de oro.
Alegría ha acompañado a García durante todo el proceso de preparación y clasificación a Tokio 2020.
Pero la fortaleza del equipo que acompañó a Juan Diego no terminó ahí. María del Rosario Espinoza, la más grande exponente del taekwondo en la historia de México, fue invitada para ser parte del equipo y asesorar a los competidores con toda la experiencia que le da ser poseedora de tres medallas olímpicas, una de cada metal: oro en Beijing 2008, bronce en Londres 2012 y plata en Río de Janeiro 2016.
María ha sido pieza clave en el éxito de García, al igual que Alegría, ya que sus vivencias en el tatami ayudaron a un chico que ya entró en la historia del deporte mexicano.
«Tuve mucho acercamiento con María Espinoza, me empujó a dar el máximo, porque me contaba sus experiencias», dijo García, poco después de recibir su medalla.