LOUISVILLE, Ky. (AP) — El Derby de Kentucky regresa el primer sábado de mayo y poco a poco trae consigo las vistas, los sonidos y los rituales familiares de Louisville.
Y los funcionarios locales y los dueños de negocios tienen la esperanza de que se traduzca en un mejor flujo de efectivo después de que la pandemia de coronavirus trastornara el calendario del Derby el año pasado.
El espectáculo aéreo Thunder Over Louisville y el espectáculo de fuegos artificiales que da inicio a las actividades del Derby se reanudaron con un auge resonante el fin de semana pasado. Maratones y carreras de ciclismo, que se llevaron a cabo prácticamente el otoño pasado, salieron en vivo este fin de semana, junto con miles de patos de goma amarillos flotando en el río Ohio en el Derby “Ken-ducky”.
Los turistas regresan constantemente a los hoteles, restaurantes y museos del centro. Las escenas más esperadas se vislumbran en la 147th Run for the Roses del sábado en Churchill Downs con mujeres con grandes sombreros de colores y hombres con trajes de seersucker, que ocasionalmente se quitan las mascarillas requeridas para beber bourbon y julepes de menta y fumarse puros.
“Definitivamente huele a Derby”, dijo Kenzie Kapp, oriunda de Louisville, propietaria de un negocio que fabrica tocados y disfruta de un aumento en la demanda de máscaras que combinen con sus sombreros y tocados.
“En el otoño, fue diferente. Es tan bueno estar de regreso el primer sábado de mayo. Eso se siente bien. Se siente bien. Se siente como en casa «.
Las pautas de distanciamiento social extenderán a la multitud debajo de los Twin Spires y el cuadro interior, un marcado contraste con el Derby sin espectadores del otoño pasado que se retrasó hasta el Día del Trabajo. En cualquier medida, es una señal alentadora de un regreso a la normalidad para el evento más importante de las carreras de caballos y su ciudad natal.
El impacto económico de este año en la región se estima en $ 34,6 millones, menos de una décima parte de los típicos $ 400 millones que genera el evento. La capacidad tanto del Kentucky Oaks como del Derby en Churchill Downs está limitada al 40% al 50% para los asientos reservados y hasta el 60% en ciertas áreas privadas. Aproximadamente 15,000 fanáticos podrán ingresar al infield, con una asistencia total de alrededor de 45,000.
Si bien esas proyecciones están 100.000 por debajo de lo normal, eso es suficiente para reavivar las esperanzas de las empresas afectadas la primavera pasada por el primer aplazamiento del Derby desde 1945.
