No, no es lo más recomendable jugar la Liga de Campeones de la Concacaf en estos momentos, con un calendario futbolístico tan complicado y con una pandemia que aún no se controla. Pero Cruz Azul quiere ser empático, así lo manifiesta su técnico Juan Reynoso, quien se pone del lado de los cuadros caribeños, centroamericanos, “que necesitan de los equipos mexicanos para reactivar su futbol”.
La Máquina jugará contra el Arcahaie haitiano en la Concachampions, un juego que no se desarrollará en Haití debido a la falta de infraestructura y seguridad del equipo que ahora actuará como local en República Dominicana: “Lo recomendable y lo que eligiríamos nosotros es jugar este torneo en la pretemporada que viene, no ahora, por lo que se juega en México”, dijo el peruano en conferencia de prensa.
Pero, “también me pongo en la lado de los equipos que no son mexicanos, ellos necesitan este tipo de torneos, uno tiene que ser empático. Lo recomendable es que no se juegue en abril y mayo, pero comprendemos que la otra parte necesitan de los equipos mexicanos de Estados Unidos y Canadá para reactivar el futbol y que se sientan en competencia de nueva cuenta”.
Así que Cruz Azul encarará el juego con toda seriedad, pero echando en primera línea a sus suplentes, a los que no tiene tantos minutos en el campo: “Tomamos la decisión de viajar a los que vienen jugando menos, pero como contra cualquier rival y cualquier cancha en que se presente Cruz Azul, hay que darle el respeto al equipo de Haití; si ha llegado a esta fase es porque tiene fortalezas. Esperemos que no nos den sorpresas, estos equipos por sus características sorprenden al más grande, esperemos que no les dé ahora”.
Esto es una prueba para los que viajan con la responsabilidad de vestir la camiseta cementera: “Para estar en un equipo como Cruz Azul cuenta mucho el presente. En esta competencia interna valoramos mucho el hoy. Sabemos que será un juego duro por el clima, por el rival, hay muchas cosas que juegan en contra, pero lo planificamos para estar lo más descansados posibles… Preparamos una edición a los muchachos, es un típico equipo caribeño, de jugadores muy rápidos, potentes que van con mucha vehemencia a las pelotas divididas, y nosotros debemos de ser inteligentes”.
No hay miedo a las lesiones por el “inocente” juego caribeño: “En el futbol te puedes lesionar en tu casa, son leyendas urbanas. Si pensamos en un plantel distintos es porque queremos que todos jueguen más, ver en qué momento está cada quien. Lo otro siempre te ocupa… Me preocupa más el regreso, con todo lo que ello implica”.
Cuando fue jugador de Cruz Azul, en los 90 e inicios de siglo, a Reynoso también le tocó disputar este torneo, por eso encara el torneo con buena actitud: “Son experiencias nuevas. Uno que jugó en el futbol mexicano, que le tocó jugar en Concacaf, fue a jugar a Honduras, Jamaica, lugares de mucho calor, jugadores muy fuertes, son retos nuevos y distintos y todo suma en lo individual. No es una aduana fácil”.