La era de Diego Cocca en la Selección Nacional de México empezó con un engañoso triunfo 2-0 sobre Surinam en Paramaribo, y es que el Tricolor jugó mal. Los locales carecieron de puntería y de haberla tenido el marcador habría sido totalmente diferente.
Los goles de Johan Vásquez y uno en propia puerta en el segundo tiempo maquillaron por completo la presentación de Cocca. México fue un equipo sin idea, que sufrió demasiado en un partido en el que la desesperación fue apareciendo.
En el primer tiempo, el cuadro mexicano fue una calca de lo que era con Gerardo Martino hace unos meses; es decir, un equipo sin idea, sin saber cómo atacar y sin opciones de gol.
La historia del segundo tiempo empezó igual, sólo que el arco de Carlos Acevedo todavía corrió más riesgo; tras el aviso la defensa se acomodó bien y cerró los espacios, pero de medio campo para adelante el equipo era inoperante.
Pasaron lo minutos y la suerte se fue poniendo la camiseta de México, primero con el gol de Johan Vàsquez, el cual acabó con el buen ánimo de Surinam, que se sabía mejor pero las cosas no les salieron.
Luego Santiago Giménez falló un penal, y cuando los locales de nueva cuenta parecían despertar, un desborde de Antuna le dejó el arco solo a Piojo Alvarado; ahí un defensa local metió la pierna para el tanto.
La siguiente prueba de Cocca será el domingo contra Jamaica en el Azteca, pero ahí será con el equipo A, con la mayoría de los europeos que están trabajando en el CAR y que son los de mayor jerarquía.