Inglaterra empató 1-1 ante Hungría en Wembley, frenó en su escalada hacia el Mundial de Qatar y emplazó su clasificación directa al choque que disputará la próxima jornada frente a Albania.
Después de superar 0-5 a Andorra, los hombres de Gareth Southgate, en su segundo envite de la ventana internacional, tenía la opción de dejar muy encarrilada su clasificación para el Mundial.
Enfrente tenía a un rival que languidece desde México 1986, su última participación en una Copa del Mundo, y que se enfrentó a un pasado de gloria con el recuerdo de la exhibición en Wembley del 25 de noviembre de 1953.
El encuentro fue muy parejo e inclinado para ambos lados, donde no se sabía quién iba a abrir el marcador pero una jugada ‘fortuita’ le dio la ventaja a los visitantes.
El primer gol cayó al minuto 24 desde los 11 pasos, pues Luke Shaw, jugador ingles, levantó mucho su pierna y le pegó en el rostro a un hungaro, por lo que se marcó penal. Roland Sallai lo convertiría en gol.
El empate caería minutos después, al 37, pues se cobró un balón parado donde hubo un desvío dentro del área; el esférico le quedó a John Stones, quien sólo tuvo que empujarla y marcar el empate definitivo.
Con este 1-1 firmado en el Grupo I, Inglaterra se mantiene como líder de Grupo con 20 puntos tras 8 partidos; Hungría atraviesa un escenario adverso, pues con 11 unidades están en el cuarto lugar.