BUDAPEST, Hungría (AP) — La Eurocopa le dará finalmente a Memphis Depay la oportunidad de brillar en el escenario internacional.
El artillero holandés llega al partido contra Republica Checa por los octavos de final el domingo con dos goles y dos pases de gol en su haber. Ha anotado siete goles en ocho partidos en 2021, y a sus 27 años está iniciando lo mejor de su carrera.
La habilidad de Depay fue un gran factor en las tres victorias de su equipo en la fase de grupos de Euro 2020. El delantero que en la próxima temporada jugará en Barcelona anotó o participó en cuatro de los ocho goles.
“Demostró lo importante que es para nosotros. Es un jugador con cualidades especiales”, dijo el defensor Daley Blind. “Puede hacer magia con el balón”.
El técnico asistente holandés Ruud van Nistelrooy, que como jugador fue un estupendo goleador, dijo que Depay se ha convertido en un líder en el campo.
“Veo concentración y convicción, la necesidad de demostrar lo que tiene y la voluntad de ser el mejor”, dijo van Nistelrooy. “Es algo que me parece hermoso”.
Pero no siempre fue así.
Hace seis años llegó a Manchester United en medio de gran bombo publicitario. Le dieron la emblemática camisera número 7, la que usaron George Best, Eric Cantona, David Beckham y Cristiano Ronaldo.
Best y Cantona fueron dos de los jugadores más hábiles que pasaron por United; Beckham, uno de sus mejores mediocampistas. Ronaldo, un deslumbrante artillero de pies veloces, tiene uno de los récords de más goles con una selección nacional, un total de 109. Es el goleador de Euro 2020 con cinco tantos.
El peso de tanta expectativa aplastó a Depay, que anotó apenas siete goles en 53 partidos con United.
Reanudó su carrera con el séptuple campeón francés Lyon en 2017, el mismo año en que empezó a dedicarse a su otra pasión, la de artista hip-hop.
Depay anotó 76 goles en 178 partidos con Lyon, entre ellos un espectacular disparo desde la media cancha.
Los checos también tienen un artillero temible, Patrik Schick, con tres goles en su haber en lo que va de la Euro, tanto como el holandés Georginio Wijnaldum.
Schick anotó uno de los mejores goles del torneo, un remate espectacular desde cerca de la línea media en el partido que los checos ganaron a Escocia 2-0.