PARÍS (AP) — El organismo rector de la Fórmula Uno desestimó el jueves las críticas de que su auto de seguridad fue demasiado lento luego que los pilotos se quejaran tras el Gran Premio de Australia el pasado fin de semana.
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) indicó en un comunicado que la prioridad no era complacer a los pilotos sino garantizar la seguridad en la pista.
“La FIA quisiera reiterar que la función principal del auto de seguridad no es, por supuesto, la velocidad en su totalidad, sino la seguridad de los pilotos, comisarios y oficiales”, se lee em el comunicado. “El impacto de la velocidad del auto de seguridad en el rendimiento de los autos que le siguen es una consideración secundaria, ya que el impacto es igual entre todos los competidores”.
Las tareas del auto de seguridad de la F1 son compartidas por los autos Mercedes y Aston Martin esta temporada, y el auto de seguridad de Mercedes es alrededor de cinco segundos más rápido por vuelta.
El auto de Aston Martin se utilizado dos veces durante el GP de Australia, y el campeón mundial Max Verstappen, de la escudería Red Bull, lo comparó con “una tortuga” porque le pareció demasiado lento.
Los pilotos no podían calentar lo suficiente sus neumáticos ya que conducían detrás a velocidades más bajas de lo que les habría gustado.
“Estaba luchando enormemente para ponerles algo de temperatura, así que también batallé”, dijo el piloto de Ferrari Charles Leclerc, quien ganó la carrera. “Para ser honesto, quería quejarme, pero luego comprobé cuánto se deslizaba el auto de seguridad en la curva y no creo que hubiera nada más que pudiera dar”.