Otra caída, más preocupación para Manchester United. En el Olímpico de Londres, sufrió su segunda derrota en fila ante West Ham, por 1-0, y comprometió su posición dentro del Top 4 de la Premier League, de acceso a la próxima UEFA Champions League.
Los Red Devils tomaron la iniciativa del encuentro y se hicieron con el control de la pelota. A partir de esto, generaron peligro de inmediato, con un disparo cercano de Bruno Fernandes. La más clara sucedió pasado el cuarto de hora: Marcus Rashford se hizo lugar a un costado del área y tiró pegado al poste izquierdo.
Pero todo manejo del partido se derrumbó en un instante para los de Erik ten Hag, de manera increíble. En el minuto 27, Saïd Benrahma condujo por el centro, probó un remate por bajo y David de Gea puso su brazo liviano, en su estirada, por lo que el balón terminó de vencerlo.
Tras esta inesperada desventaja, la visita intentó recomponerse enseguida. Para eso, se lanzó al ataque y Antony acarició la igualdad con un fuerte lanzamiento cruzado, que impactó el palo derecho. Sobre el cierre de la primera mitad, el encargado de abrir la cuenta avisó con tiro certero, esta vez, detenido por el guardavallas español.
Fue en el complemento el momento en el que los Hammers sintieron el impulso del marcador favorable. Es que salieron con otra cara y, en el comienzo, se aproximaron con peligro para buscar otro tanto, el que llegaron a festejar por medio de Michail Antonio, pero el mismo no valió por infracción previa.
Con el paso de los minutos, los de Mánchester evidenciaron una caída de nivel en su rendimiento al no poder encontrar los caminos para aspirar al empate. Esto, en parte, ocurrió por la solidez adquirida por el cuadro de David Moyes, en el que crecieron las individualidades y, en consecuencia, la faceta colectiva.
Nuevamente, los Irons estuvieron a las puertas de una conversión, con un cabezazo de Tomas Soucek, invalidado por fuera de juego. Recién en el tramo final, Rashford se arrimó en el elenco de Ten Hag, con un disparo arriba, por la derecha del arco, despejado por el portero.
Las complicaciones continuaron hacia el final y, salvo acercamientos, la caída fue inevitable para el United que, con este resultado, se sostiene con lo justo en el cuarto lugar, con 63 unidades, una por encima de Liverpool. De todos modos, aún debe una jornada y ya tendrá que enfocarse en recuperarse en su próximo compromiso contra Wolverhampton, como local.
