Lo ocurrido en el Subaru Park este sábado 15 de junio es digno de un guión de película.
El Inter Miami peor no la pudo tener; sin embargo apelando a la épica se trajo a casa los tres puntos con un soberbio triunfo 2-1 ante un Philadelphia Union que todavía no se explica lo sucedido.
Y es que si bien las ausencias de Leo Messi y Luis Suárez parecían pesar bastante para el Inter, arrancar con un 1-0 en contra desde el minuto 3, por obra de Mikael Uhre, y luego quedarse con 10 hombres pareció ser un castigo excesivo, Pero aguantó como pudo y el esfuerzo se vio compensado con una espectacular victoria.
Goles de Julian Gressel (47’ ) y de Leo Afonso (94’) propiciaron la heróica remontada del equipo que dirige Gerardo Tata Martino, cuyos cambios surtieron efecto, después de las expulsiones de David Ruiz y de Tomás Avilés y de poner el mejor once disponible.
Ahí inició con Drake Callender, Chelo Weigandt, Avilés, Sergiy Kryvstov, Jordi Alba; Ruiz, Sergio Busqiuets, Benjamin Cremaschi, Gressel, Leonardo CXampana y Robert Taylor..
De este modo Miami (11-5-3) se mantuvo en el primer puesto de la Conferencia Este con 38 puntos; mientras Filadelfia (4-8-5) se queda en el 8vo con 20.
La victoria tiene mucho mérito no solo por la manera que fue sino porque es la primera sin Messi, Suárez y Martías Rojas, concentrados con sus selecciones para la Copa América.
Juego
El primer tiempo terminó 1-0 favorable al Union, con toda justicia, pese a que el Inter fue el dominador (63.4%) y no solo por el gol, sino porque tiro más 9-3 y fue superior.
Miami volvió a sus andadas y de nuevo Miami permitía un gol tempranero en el marcador y luego no supo qué hacer con el balón.
Y es que apenas se habían sentado los aficionados en sus asientos (minuto 3) cuando Philadelphia puso el 1-0 en la pizarra del Subaru Park. Mikael Uhre culminó un contraataque de libro tras recibir un pase en profundidad de Jakob Glesnes, quien apenas sin oposición de los mediocampistas tomó a toda la defensa adelantada.
Uhre dejó tirados a Avilés y a Kryvtsov, que fueron a buscar guayabas al centro del campo, y tras entrar en el área por el mismo centro sacó un remate con la izquierda raso por el lado derecho de la portería fuera del alcance de Callender que hizo muy poco para impedirlo.
El Inter no generaba peligro, con todos sus jugadores desubicados, torpes con el balón, sin criterio, dejando a Busquets completamente aislado, algo que los de Filadelfia tuvieron algo que ver, para completar los primeros 45 minutos con más pena que gloria.
Tras el descanso los muchachos de Miami salieron a por el partido y al minuto 47. Consiguieron el empate 1-1 con un impresionante volea de pierna derecha de Gressel que se coló por el ángulo derecho de la portería, tras recibir un pase de Cremaschi, que se levantó un poco, desde la izquierda, luego de una internada y centro de Alba.
Luego llegó al 68’ la expulsión de Ruiz por doble amarilla cuando el Inter mejor jugaba, lo cual invitaba a pensar que la derrota era cuestión de tiempo, sobre todo después de la expulsión de Avilés al 84’, también por doble amarilla.
Sin embargo, el equipo resistió y cuando peor la pasaba consiguió el gol del triunfo 2-1 al minuto 94 en un contraataque culminado por Afonso que acababa de entrar. Al minuto 91 por Campana, tras un gran pase de Yannick Bright, quien sustituyó a Taylor al 78’.
