EL GAFETE | Lo que Nos Dejó el Tazón

Por Manuel Zepeda (@MZepeda77)

Antes de analizar lo que rodeó al Tazón México, hay que comenzar por lo que realmente vale la pena encabezar: el juego en sí. Para quienes gustamos del fútbol americano y en todos sus frentes, siempre es grato toparse con encuentros como el del pasado 21 de mayo en el Estadio Caliente de Tijuana.

Los Fundidores de Monterrey se proclamaron campeones de la LFA (Liga de Fútbol Americano Profesional), luego de derrotar a Gallos Negros de Querétaro por 18-14. Sello de una épica batalla de 60 minutos efectivos sobre el emparrillado.

Ambas escuadras se brindaron ante los presentes en la casa de los Galgos y ante quienes los sintonizaron a través de la pantalla o de un dispositivo. Vimos estampidas terrestres de Marcelo González, los pases de Shelton Eppler, las recepciones de Tavarious Battiste y la oportuna intervención defensiva de Martín Maldonado, a la postre el Jugador Más Valioso. También citar a Brandon Calzoncit.

Eso por parte de los hoy campeones, pero los ahora ex campeones debemos citar el esfuerzo de Jason Smith, Alan Zárate, Marco García y más jugadores por tratar de llevar un campeonato a tierras queretanas, pero debieron hoy conformarse con el segundo sitio.

Fundidores, entrenados por un ejemplo de vida llamado Carlos Strevel, son el primer equipo de provincia que cosecha título en la LFA. Además, fue la primera vez que defensivo es nombrado MVP en el Tazón México y se unen a la lista de monarcas que integran Mayas, Mexicas y Condors.

Ahora, ¿qué sigue haciendo falta al Tazón? Sorprendió que hubiera menos aficionados de lo esperado en el «Mortuorio del Hipódromo» (o «Mictlán», como lo apodan los Xolos). Claro que no se esperaba un soñado lleno como en otras Finales, pero sí al menos 10,000 aficionados. Faltó publicidad y mayor cobertura, probablemente.

El Show de Medio Tiempo fue aceptable con las presentaciones de Colectivo Nortec, Pato Machete y Niña Dioz. Realmente hicieron levantar a la afición de sus asientos y a quienes estuvieron pendientes en los monitores.

La LFA tiene mucha tarea por delante para que siga creciendo como circuito profesional, pero se reconoce el esfuerzo de este año por tratarse de la reactividad post-pandémica. Mismo aplauso para su competencia, la Liga FAM, que ahí va tratando de ser vigente. Ojalá que después vuelvan a juntarse o por lo menos no coincidan en fechas, porque ambas Ligas lo valen.

El Tazón México V ya es historia y se recordará como un parteaguas en su desarrollo. 
De todos modos, el tiempo será el mejor juez.     

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *