MIAMI GARDENS, Florida EEUU (AP) — Mike McDaniel, entrenador en jefe de los Dolphins de Miami, ha insistido en que quiere ver un aumento en la confianza del quarterback Tua Tagovailoa.
No solamente la confianza en su propio entendimiento de una nueva ofensiva, sino aquella que se requiere después de cometer errores.
“Es un perfeccionista”, dijo McDaniel la semana pasada. “Quiero que su confianza supere su perfeccionismo”.
Al preguntarle a Tagovailoa sobre su confianza, probablemente dirá que es, y siempre ha sido, alta. Pero McDaniel dijo que algunas veces puede decir que Tua es muy duro consigo mismo después de lanzar un pase incompleto.
En el partido inaugural de Miami en contra de Nueva Inglaterra, cuando Tagovailoa completó 23 de 33 pases para sumar 270 yardas con un touchdown y sin intercepciones, McDaniel notó que el mariscal de campo se enfocaba en haber lanzado un pase incompleto, en lugar de avanzar hacia la siguiente jugada.
“Si él está bien con su confianza, que sé que llegará el momento, será más difícil para mí decir que no estaba contento con la última jugada”, dijo McDaniel. “Porque es el entender: ‘¡Vaya, no lo hice tan bien! Pero, bueno, lo haré perfecto la siguiente vez’”.
Eso cambió un poco durante la remontada de los Dolphins para derrotar a los Ravens en la semana 2, dijo McDaniel.
Tagovailoa tuvo un pobre desempeño en la primera mitad y sufrió dos intercepciones, la segunda de las cuales, dijo McDaniel, dejó “absolutamente molesto” al quarterback.
Pero lo que siguió fue la mejor actuación estadística de su carrera en la NFL, particularmente en el último cuarto, cuando lanzó cuatro pases de anotación y 199 yardas en los 15 minutos finales para borrar una desventaja de 21 puntos. Mejoró su actuación con seis pases de anotación y 469 yardas en total, la mayor cantidad para un quarterback de Miami desde que Dan Marino lanzó para 473 yardas en contra de Nueva Inglaterra en 1994.
En el cuarto periodo tuvo anotaciones de 48 y 60 yardas con Tyreek Hill y dos más con Jaylen Waddle y River Cracraft.
“Si quieres hablar de todo lo que hablamos; qué tan fácil de entrenar es, es enorme, porque se dejó de preocupar sobre la jugada anterior”, dijo McDaniel. “Salió a jugar y asumió en serio su responsabilidad para que sus compañeros vieran: ‘¡Hey, voy a liderar a este equipo en confianza!’”.
Hay un elemento de confianza que se da naturalmente con la comodidad. Y con una ofensiva que parece mucho mejor claramente de lo que era el año pasado.
Tagovailoa dice que se siente más cómodo distribuyendo el balón a los jugadores clave y “dejando que se pongan a trabajar”.
“Tengo que concentrarme en lo que cada jugada exige de mí y salir a ejecutar”, dijo.
Tagovailoa fue seleccionado para transformar la franquicia, pero al no haberse desarrollado tan pronto como algunos esperaban, comenzó a haber dudas sobre mantenerlo o encontrar a alguien más para que se encargara de la misión.
La temporada pasada, los Dolphins perdieron siete partidos al hilo en algún punto, y consideraron hacer un cambio por Deshaun Watson, entonces quarterback de los Texans. Pero las conversaciones se enfriaron y todo se complicó por los abusos sexuales atribuidos a Watson.
Semana a semana, Tagovailoa enfrentó preguntas sobre si sentía que la franquicia confiaba en él, a lo que siempre contestó con versiones distintas, pero con el mensaje: “sí, por supuesto”.
Esta temporada los Dolphins tienen marca de 2-0 por primera vez desde 2018 y tanto McDaniel como los compañeros de Tagovailoa tienen claro que hay plena confianza en él.
