La llegada del Xavi Hernández al Barcelona ha generado un giro de 180 grados en el equipo, ya que impuso normas y un orden que se había dejado de lado en Can Barca desde la salida de Luis Enrique en 2017. Una de las máximas de Xavi es multar a los jugadores que no respeten los horarios fijados por el cuerpo técnico y Ousmane Dembélé sería la primera ‘víctima’. El dinero que se reúna por esta falta se usará para llevar a cabo una cena con todo el grupo a final de temporada.
Según ESPN, el extremo francés arribó a la Ciutat Esportiva Joan Gamper a las 8:33 horas, cuando el límite que tienen los jugadores para presentarse son las 8:30 para comenzar la sesión de entrenamiento a las 10. Sin embargo, cabe la posibilidad de que el galo habría informado sobre este retraso alegando un motivo de fuerza mayor.
Dembélé actualmente se encuentra lesionado. En esta ocasión se le ha diagnosticado una elongación en el semimembranoso del muslo izquierdo.
De acuerdo al periodistas, Alex Pintanel de Gol, Xavi fue el primero en llegar a las 7:52 horas, mientras que Ansu Fati fue el primer jugador en presentarse.
El actual técnico del Barcelona quiere que sus jugadores, tanto sanos como lesionados, lleguen más temprano a la Ciutat Esportiva para que desayunen juntos y convivan. Por otro lado, Xavi también quiere aprovechar la presencia de los futbolistas horas antes para conversar de forma individual con alguno de ellos, en caso de ser necesario.