La Máquina acelera y lo hace en un momento que parece dejar atrás todo lo negativo que envolvió al club.
Esta noche, ante los ojos de Ricardo Ferretti, nuevo entrenador del equipo y de Guillermo Vázquez como auxiliar, la plantilla celeste pudo vencer a Atlas 1-0 con gol de Augusto Lotti.
Vámonos por partes. Este gol es el primero del refuerzo argentino que pese a ser reconocido por Raúl Gutiérrez, el mismo Potro lo relegó y no le dio minutos. Sin embargo, Joaquín Moreno apareció para meterlo de cambio, otorgarle confianza y Lotti respondió con gol y no cualquier gol, sino el de la victoria.
Justamente Moreno logró esta noche lo que el Potro no había podido en el inciso del Clausura 2023: dos triunfos consecutivos. El DT interino entró en lugar de Gutiérrez y tomó a un equipo con solo un punto para darle seis en solo dos cotejos e igualar la ofensiva con cuatro anotaciones que se hicieron en la era del Potro en cinco cotejos y ahora esa misma cantidad en solo dos enfrentamientos bajo la dirección técnica de Moreno.
Y no solo Tuca y Memo estuvieron en el Azteca, también lo hicieron Diego Cocca, técnico de la Selección Mexicana y los directivos de la Federación Mexicana de Futbol: Rodrigo Ares de Parga y Jaime Lozano. Bueno, pues hasta el estratega del América, Fernando Ortiz se dio el tiempo de venir a ver el juego para analizar a sus próximos rivales, el inmediato es el cuadro tapatío.
Un primer tiempo mesurado. Cruz Azul se mostró más ofensivo, Alonso Escoboza, Ramiro Carrera y Charly Rodríguez se convirtieron en protagonistas del juego.
Carrera tuvo una oportunidad muy clara que hizo lucir a Camilo Vargas, pues el portero rojinegro se lanzó para desviar muy apenas el esférico. Otra chance fue de Escoboza, el futbolista tardó en definir, se decidió pero atrás ya estaba bien posicionado Hugo Nervo para hacer la labor defensiva.
Inició el segundo tiempo, de nueva cuenta los celestes se vieron dominantes. Moreno comenzó con los cambios y entre ellos le dio entrada a elementos como el propio Lotti, Alexis Gutiérrez, Rodrigo Huescas o Michael Estrada.
Estas modificaciones le terminaron ayudando a la plantilla cementera a destrabar el trabajo del rival, pues precisamente Huescas sirvió un gran centro a su compañero argentino quien solo se elevó para cabecear y así mandó la pelota al fondo de las redes.
El gol provocó una gran ovación en un Azteca pletórico, poco más de 39 mil almas gritaron y desahogaron la frustración de los resultados que está siendo superada por este cambio radical en la institución.