Chivas tuvo que tocar fondo para impulsarse y salir. El 4-0 que logró Chivas contra Necaxa revivió a todos. La ilusión renació en poco tiempo. Rayados era una prueba de otro calibre y también la pasó. El realce es en serio. Los boletos los invitaron los jugadores luego de empatar frente al Atlas. La gente respondió y abarrotó el estadio Akron.
La fiesta estaba puesta, los seguidores llegaron, pero el invitado tardó más de lo esperado. Santiago Ormeño salió de la banca y casi acabándose el juego se revolvió en el área para marcarle al líder y derrotarlo. Santiago, Ricardo Cadena y todos los rojiblancos se dan un respiro.
Chivas tuvo un inicio frenético. Ángel Zaldívar pudo abrir el marcador con demasiada rapidez, pero Esteban Andrada contestó de buena manera. Los tapatíos siempre buscaron la portería
Fueron alrededor de veinte minutos los que el Rebaño atacó por todos lados, Rayados no esperaba esa intensidad y para su fortuna no les hicieron daño.
Luego de eso el juego se equilibró, el partido se desarrolló como se esperaba, paridad en la mitad del campo y esporádicas jugadas en el área.
Chivas meció la red, Luis Olivas estuvo atento a un rebote que dio Andrada tras un remate de Fernando Beltrán, el canterano apenas se paraba para celebrar, pero la anotación se invalidó por un fuera de lugar.
Luis Enrique Santander detectó la posición adelantada y la confirmó con sus asistentes. La presencia de Santander luego de cinco años de no pitarle al Rebaño en el estadio Akron generó morbo. La final contra Tigres del Clausura 2017 lo persigue hasta la fecha.
Monterrey también anotó, Jesús Gallardo finiquitó una jugada individual de Luis Romo, pero el lateral también fue pillado en posición adelantada. El invitado se resistió, pero merodeaba el estadio.
Los dos técnicos reforzaron su ataque, Vucetich metió a Rodrigo Aguirre y Poncho González, mientras que Ricardo Cadena le apostó sus fichas a Santiago Ormeño y Cristian Calderón. Los cambios rojiblancos surtieron efecto. Ormeño recibió un balón en el área y como en sus mejores épocas con Puebla levantó la vista y puso el esférico lejos de Andrada.
Esa anotación fue suficiente para vencer al líder y darles un alivio a todos. Ormeño anotó luego de cinco meses en blanco.