Lo que pintaba para ser el resurgimiento del Barcelona culminó con la misma penuria que han mostrado en la presente campaña. Y es que los culés se encaminaban a la victoria de manera sencilla al tener una ventaja de tres goles ante el Celta de Vigo, pero al final se vieron igualados en el marcador.
Parecía que el Barça había recuperado la memoria, puso al Celta contra las cuerdas desde los primeros minutos, pues en 34 minutos ya se habían puesto adelante en la pizarra con los goles de: Ansu Fati (5′), Sergio Busquets (18′) y Memphis Depay (34′). Todo era felicidad.
Sin embargo, en el segundo tiempo todo cambió, el exceso de confianza y la lamentable lesión de Ansu Fati al 46′ por un problema en el muslo fueron mermando a los catalanes, al tiempo que los locales fueron ganando terreno en la cancha.
Y es que Iago Aspas comenzó a gestar la remontada, luego de que al 52′ dio el primer llamado al mandar a guardar el balón al fondo de la reda, mientras que Nolito 74′ metió más drama al partido.
El mexicano Néstor Araujo, que inició en el banco de suplentes, ingresó de cambio al 70′ y colaboró para la igualada; misma que llegó de forma dramática con el tanto de Iago Aspas al 96′.
Los culés se llevaron un fuerte golpe en su intento por resurgir con su nuevo DT Xavi Hernández, quien desde la siguiente semana comenzará a trabajar en la reestructuración del equipo, aunque está claro que tendrá que laborar horas extras para levantar a un Barça que hoy nadie respeta.