La NFL es uno de los mejores espectáculos deportivos del planeta y lo confirmó con su partido inaugural del 2021 en el que los Tampa Bay Buccaneers vencieron con enorme dramatismo a los Dallas Cowboys con marcador de 31-29, con un gol de campo en el último segundo.
En calidad de campeones defensores del Super Bowl y buscando ser apenas el segundo equipo que repite como monarca en la NFL en este siglo, los Bucs se enfrascaron en un «tiroteo» ofensivo con los Cowboys, que pese a la derrota dejan muy buenas sensaciones porque tuvieron en un puño a Tom Brady y compañía.
Y es que Dallas falló dos goles de campo y un punto extra, lo suficiente como para haber salido victoriosos del Raymond James Stadium, el mismo inmueble que vio a los Buccaneers coronarse en febrero pasado y que este jueves lució a su máxima capacidad, como ningún estadio se veía en la NFL desde 2019 por la pandemia de COVID.
Tom Brady tuvo una noche espectacular con cuatro pases de anotación, dos de esos para su eterno cómplice, Rob Gronkowski, con quien suma 100 conexiones en las diagonales, siendo la tercera pareja más efectiva en ese rubro en la historia de la liga.
Habrán quienes señalen que TB12 sufrió dos intercepciones, pero habrá que contextualizar que la primera fue porque a Leonard Fournette le rebotó un balón perfectamente controlable y la segunda fue en un Hail Mary para terminar la primera mitad.
Eso sí, los campeones de la NFL deberán poner especial énfasis en las pérdidas de balón porque esta noche sumaron cuatro; además de las referidas intercepciones a Brady tuvieron dos balones sueltos, uno de ellos a dos yardas de las diagonales en las manos de Chris Godwin.
La derrota de Dallas era algo «presupuestado», las casas de apuestas daban favoritos a los Bucs hasta por 11 puntos, pero si algo dejó claro esta noche el Equipo de América es que tienen mucho con qué pelear por un lugar en la Postemporada, especialmente por pertenecer a la División Este de la Conferencia Nacional, la que en papel es la más débil de toda la National Football League junto a la AFC Sur.
Tras perderse la mayoría de la temporada pasada por una severa lesión de tobillo que requirió de cirugías, Dak Prescott volvió de manera espectacular con 403 yardas aéreas y tres pases de anotación, dos para Amari Cooper, que acumuló 139 yardas en 13 recepciones y CeeDee Lamb también rebasó las 100 yardas con un touchdown.
La defensiva de Dallas, que fue lo más cuestionado el año previo, dio muestras de mejora con el novato de primera ronda, Micah Parsons, además de una línea frontal competitiva y Trevon Diggs confirmándose como el mejor esquinero del equipo, nulificando a Mike Evans en Tampa.