El Real Betis comenzó con buen pie su andadura por segundo año consecutivo en la Liga Europa, gracias a su trabajada victoria (0-2) en su visita al modesto Helsinki finlandés, con William José de protagonista y la mala noticia de la lesión de Juanmi, donde el mexicano Andrés Guardado ingresó de cambio al 75.
El conjunto verdiblanco, que el año pasado no pudo pasar de los octavos de final ante el Eintracht, supo sacar tres puntos claves en un campo complicado, con el siempre incómodo césped artificial, y donde le bastó su mayor superioridad y acertar en las pocas ocasiones que tuvo.
Y eso que el choque no comenzó bien para Manuel Pellegrini, que vio como el único de los titulares que repetía respecto a la derrota con el Real Madrid, Juanmi, caía lesionado tras un mal apoyo del tobillo. Este percance y la gran cantidad de rotaciones no ayudó a los béticos, aunque en el campo tenían jugadores de nivel como William Carvalho, que retornaba, Willian José, Joaquín o el central Pezzella.
El Betis, de todos modos, controló sin excesivos problemas las acometidas de los locales, aunque también le costó generar ocasiones de gol. La primera, un disparo de Rodri, lo repelió bien Hazard, mientras que Carvalho se topó con el larguero. Justo antes del descanso, el colegiado decretó penalti y Willian José no perdonó.
El Helsinki, impulsado por Browne, volvió de los vestidores con más empeño y los visitantes pasaron minutos complicados, aunque con pocos sustos para Claudio Bravo. Pellegrini buscó más calidad y calma con la entrada de Sergio Canales, y poco después, tras un saque de esquina embarullado, Willian José recogió un balón perdido y remachó el 0-2.
El equipo finlandés estuvo cerca de coger aire a continuación, pero el VAR anuló el tanto de Abubakari y el Betis, ya con más espacios, no acertó a sentenciar definitivamente, sobre todo en una clara ocasión de su goleador, que perdió una buena opción para hacer el triplete.