Campanazo en el Cuauhtémoc. Las pupilas de Juan Carlos Cacho se impusieron por la mínima al América, gracias a un fortuito gol de Gloria Narváez. La delantera probó de larga distancia, apenas adelante del medio campo, pero el balón sufrió un desvío y terminó dentro de las redes de Masciarelli.
Las Águilas no tuvieron capacidad de respuesta y fueron las enfranjadas las que estuvieron más cerca de ampliar el marcador, pero no pasó, 1-0 final.
Gracias al resultado, Puebla abandonó el sótano de la tabla y cerró de forma digna un mal torneo, mientras que las amarillas sólo tienen dudas rumbo a la Liguilla y se medirán a Tigres en los cuartos de final.
Las futbolistas se tomaron su tiempo para estudiar el parado táctico del rival. Las visitantes se vieron mermadas por la adaptación al terreno de juego, mientras que las locales intentaron sorprender con un par de centros que no terminaron en nada. Las pupilas de Juan Carlos Cacho, viejo conocido del balompié nacional, buscaron adelantarse en el marcador ante la inoperancia del América.
El primer intento claro a gol llegó gracias a una volea dentro del área. Barbara Figueroa midió un centro que llegó desde la parcela derecha y, aunque incómoda, remató de pierna zurda y el balón pasó apenas por un costado de la meta de Masciarelli. La guardameta se quedó estática ante el intento camotero, pero, para su fortuna, no pasó a mayores.
Siena Ruelas fue factor tras el embate poblano. América igualó la posesión del esférico y las acciones de peligro. Tuvo un par de disparos, aunque la portera poblana siempre estuvo atenta en el límite del área chica para extinguir el peligro y frustrar los intentos de las visitantes.
Ya en la parte complementaria. Puebla repitió la dosis y tuvo su justa recompensa. En un tiro de larga distancia de Gloria Narváez, el balón sufrió un desvío, suficiente para vencer a Masciarelli y gritar el gol. Todas las enfranjadas festejaron con júbilo la que podría ser su última anotación del semestre. Pese a que el desvío de la zaguera americanista fue muy evidente, el disparo llevaba dirección de portería, por lo que el cuerpo arbitral se lo dio a Narváez.
El estratega de las visitantes, Hugo Ruíz, movió sus piezas tras la anotación para tratar de contrarrestar el poderío camotero, pero el equipo no se le acomodó.
Por su parte, Juan Carlos Cacho hizo puros cambios ofensivos. Sacó a Narváez y a Worbis, pero le dio ingreso a Mariana Ramos y Mirelle Arciniega, con el afán de buscar el segundo tanto de la tranquilidad.
En los minutos finales, las Águilas intentaron, pero sin claridad en sus avances. Incluso, Puebla se quedó más cerca del segundo, otra vez con un tiro de larga distancia, que las clasificadas del empate. Con este marcador, las pupilas de Juan Carlos Cacho abandonaron el sótano de la tabla, mientras que las capitalinas tienen más dudas que certezas en la antesala de la fiesta grande.