A raíz de la disputadísima lucha por el título entre Lewis Hamilton y Max Verstappen, los fans y la prensa vieron en su incidente del Gran Premio de Gran Bretaña un campo de batallas de opiniones y análisis.
Y como la tormenta no terminó de amainar en Hungría, Verstappen finalmente perdió los estribos en la conferencia de prensa posterior a la clasificación, cuando se encontró con preguntas «ridículas» sobre las posibilidades de otro choque.
Más tarde, Fernando Alonso dio su opinión sobre el asunto, estando clara su mala experiencia frente a la prensa anglosajona en otros años y con ruedas de prensa realmente duras en el pasado.
«No vi la rueda de prensa», dijo. “Pero probablemente siento lo que están experimentando ahora. Especialmente Max, porque es el chico más joven que lucha con una leyenda, con un campeón. No es británico, por lo que siempre le va a resultar más difícil”.
Al no haber sido una respuesta realmente elaborada, Alonso fue insistido sobre el asunto tras el comentario de «no es británico», y el español explicó que sentía que el dominio de Reino Unido en Fórmula 1, con siete de los equipos con sede en Gran Bretaña, había dejado al deporte inclinado claramente hacia pilotos británicos.
«Siempre tengo la impresión de que cuando las cosas se ponen tensas en la lucha por el título… este deporte coge un ambiente británico», dijo.
“Todos los equipos son británicos. La mayoría de ustedes, periodistas de los medios y equipos de televisión, todos vienen del Reino Unido».
“Comprensiblemente, hay algo de favoritismo por el chico de vuestro país, que sigue luchando y ganando».
“Siempre, lo que sentía cuando corría, era que parecía que yo era el malo en la Fórmula 1 cuando intentaba luchar contra pilotos, normalmente, británicos».
«Cuando vi lo de Silverstone, cuando veo lo que aguanta Verstappen con algunas preguntas, etc., comprendo su posición».
Si bien los dos campeonatos mundiales de Alonso en 2005 y 2006 se produjeron después de reñidas peleas por el título con Michael Schumacher de Ferrari, su campaña más intensa fue en 2007 cuando luchó por la corona durante una controvertida temporada en McLaren junto a Hamilton.