INDIANÁPOLIS (AP) — El entrenador Nick Saban descendió del avión de Alabama el viernes por la noche. Y en medio de la noche gélida, entendió lo que le espera.
Cuando vuelva al aeropuerto, el Crimson Tide estará celebrando otro título nacional del fútbol americano universitario o estará volviendo a casa con la decepción a cuestas… e incluso con más frío.
El equipo de Saban, primero del ranking, recibió una bienvenida cálida, pese a las temperaturas, en Indianápolis. Llegó poco después del anochecer del viernes, en medio de serpentinas rojas y bajo una luna en cuarto creciente que iluminaba el cielo.
Los jugadores se dirigieron a un grupo de autobuses, con temperaturas de menos de seis grados Celsius bajo cero (20 Fahrenheit). En tanto, una banda hacía sonar sus tambores para marcar la llegada de Alabama.
Unos 90 minutos después, los percusionistas hicieron lo mismo pero para dar la bienvenida a Georgia.
Incluso para Alabama, un equipo que suele disputar los playoffs, la rutina fue distinta.
“Ha hecho mucho frío en Tuscaloosa, durante el último día o dos, pero no tanto frío como acá”, dijo Saban. “Les dije que estuvieran listos para el frío. Nuestros chicos no están tan acostumbrados. Por fortuna no estaremos jugando al aire libre. Les dije que se acostumbren mientras iban del avión al autobús”.
El lunes por la noche marcará la primera vez que el partido por el campeonato del fútbol americano colegial se dispute en una ciudad del norte. El domo del Lucas Oil Stadium estará cerrado.
Pero los organizadores no esperaban condiciones meteorológicas tan inclementes en la llegada.
Para el día del encuentro, la temperatura caería a unos 13 grados Celsius bajo cero (9 Fahrenheit)
La buena noticia es que Indianápolis cuenta con una red de pasillos subterráneos. Ello significa que los jugadores y fanáticos no tendrán que estar mucho tiempo a la intemperie.
Vivirían así un ambiente similar al de los equipos que compitieron en el torneo de basquetbol colegial, realizado aquí la primavera pasada.
Y en una región más conocida por seguir el basquetbol y el automovilismo, las expectativas giran ahora en torno de la revancha entre Alabama y Georgia.
“Realmente estamos complacidos por la oportunidad de estar en los playoffs del fútbol americano colegial. Ésta es una gran sede”, dijo Saban, quien recalcó que algunos de sus jugadores esperan volver a Indianápolis en febrero para el encuentro “combine” que se realiza anualmente con cazatalentos de la NFL.
Kirby Smart, entrenador de Georgia, no tenía previsto hablar con la prensa después de la que los Bulldogs llegaron el viernes. Los directivos de la universidad citaron preocupaciones por los crecientes casos de COVID-19.
“Hemos tenido una estupenda salud, sin problemas con la gripe o el COVID”, dijo Smart al anunciar que todo el equipo emprendió el viaje. “Los chicos han entrenado bien”.
Hasta ahora, no hay indicios de que el coronavirus altere los planes para realizar el encuentro del lunes.