El exdirectivo de Gallos Blancos, Adolfo Ríos, es uno de los sancionados por la violencia que se presentó el pasado 5 de marzo en el Estadio La Corregidora, un pleito entre aficionados de Atlas y Querétaro.
Y aunque en un inicio sólo le quedó el aceptar la sanción, después el exportero del América quiso no pagar por ‘los platos rotos’, considerando que era injusto, pues él hasta trató de ayudar.
Ríos fue castigado con cinco años de inhabilitación dentro del futbol mexicano como dirigente o administrativo, en todas las categorías, por lo que ha apelado esta sanción.
Esta información la brindó Marca Claro, que aseguran que Ríos apeló el castigo que inició el 24 de marzo; según lo publicado, el exdirigente pudo tener una respuesta con disminución de su castigo.
El Comité Ejecutivo le bajó la sanción de cinco a un año, pero aún así Adolfo no se quedó conforme, pues su idea es que le quiten todo.
Es así que sigue peleando para que anulen su castigo por completo, eso sí, puede estar cerca de un club si trabaja en prensa o algún patrocinador.