Guillermo Ochoa tiene en la mira una apuesta que no todos habrían anticipado: jugar su sexta Copa del Mundo, la cuarta de ellas como titular.
El guardameta mexicano, que actualmente milita en la Salernitana de la Serie A, sigue siendo el dueño del arco tricolor.
Y no tiene la intención de dejarlo pronto y menos si no hay un colega que sea capaz de mandarlo a la banca. Esa es su voluntad y no tienen ningún tipo de rubor en expresarla.
“Son los jóvenes los que tienen que ir a tocar la puerta, son los jóvenes los que tienen que mostrar las ganas de quedarse con mi lugar», señaló el canterano americanista.
En los últimos años han surgidos algunos porteros relativamente jóvenes, como Luis Ángel Malagón y Carlos Acevedo, pero ninguno con la capacidad real de quitarle el puesto a Ochoa, que actualmente tiene ya 37 años (y cumple 38 la siguiente semana).