CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Después de un torneo mágico en el que apareció de emergente para resucitar a Cruz Azul, al entrenador Raúl Gutiérrez se le comienza a calentar el banquillo luego de un arranque sin triunfos que tiene al equipo en la parte baja de la clasificación.
El “Potro” Gutiérrez y la Máquina procurarán levantar cabeza el fin de semana ante un duro sinodal como es Tigres, por la quinta fecha del torneo Clausura de México, que inicia el jueves con el Puebla vs. San Luis.
Gutiérrez, quien arribó al equipo en agosto del año pasado en relevo de Diego Aguirre luego de una paliza de 7-0 ante el América, revivió al equipo y lo metió a la liguilla del Apertura donde perdió ante Monterrey.
La dirigencia le quitó la etiqueta de interino y lo ratificó para el Clausura, donde los celestes han perdido dos de sus primeros tres partidos, incluido su último ante Necaxa, y sólo tienen un punto para colocarse penúltimos.
“Siempre hay gente que apoya y dice apoyar, pero se vuelven demasiado exigentes y no hay análisis de lo que pasa en la cancha”, dijo Gutiérrez a ESPN. “El otro día perdemos y nadie dice que estuvimos sobre Necaxa todo el partido y tristemente no concretamos. Son análisis por encima”.
Cruz Azul no tuvo partido el fin de semana pasado porque su rival Querétaro pidió moverlo para marzo, cuando se cumple un año de su sanción por violencia entre hinchas y ya podrá recibir espectadores en el estadio Corregidora.
Esa pausa le dio tiempo al “Potro” Gutiérrez para prepararse para recibir a Tigres, que marcha en el grupo líder luego de cuatro jornadas.
Gutiérrez, quien fue campeón mundial Sub-17 en el 2011 y apenas recibe su primera oportunidad en primera división, sabe lo que le espera si no consigue el triunfo el sábado en la cancha del Estadio Azteca, un coro de abucheos como le pasó al perder en la fecha dos ante el Monterrey.
“La afición se identifica con triunfos y victorias y un equipo ganador, esa afición está en su derecho de exigir de esa manera, pero no toda la afición es analítica”, agregó Gutiérrez. “Hay afición que dice apoyar, pero siempre tienen un pero en las palabras”.
Tigres llega al encuentro con ocho puntos en la novena posición. El equipo dirigido por el argentino Diego Cocca es uno de los candidatos al título luego de reforzar a su plantilla con el uruguayo Fernando Gorriarán, el argentino Nicolás Ibáñez y Diego Lainez.
El equipo universitario arriba al encuentro luego de empatar sin goles ante el Atlético de San Luis en un partido que dominó, pero no pudo concretar.
“Lamentablemente esto es fútbol, la gente tiene todo el derecho de no sentirse cómoda ni contenta, estamos enfocados en darle alegría y no tengo duda de que por este camino van a ser más alegrías que tristezas”, dijo Cocca.
En otros encuentros: Necaxa-Tijuana, Mazatlán-Juárez, León-Pachuca, Tigres-Cruz Azul, Santos-América, Pumas-Atlas, Chivas-Querétaro y Monterrey-Toluca.
