España debe mantener el juego de posesión, que es parte de su ‘ADN’ futbolístico, pero debe buscar alternativas ofensivas para romper las defensas de los rivales que se le cierren, como ocurrió en el Mundial de Qatar, aseguró este lunes el exfutbolista español Michel Salgado.
«Lo primero que hay que decir es que tenemos el talento, tenemos los jugadores. No es el tema, como han dicho algunos, del ‘tiki taka’ o lo que sea. Yo creo que el juego de posesión no lo vamos a cambiar nunca en la vida, ese es nuestro ADN: control del futbol, control del partido, posesión», indicó a periodistas al término de un partido en Doha entre leyendas de la FIFA y trabajadores radicados en Qatar.
«Lo que tenemos que analizar es que cuando la gente está por detrás de nosotros, y nadie nos abre los partidos, tenemos que buscar soluciones b, y esa búsqueda quizás es lo que nos falta ahora mismo, pero tenemos cuatro años» para arreglarlo, agregó.
Salgado, de 47 años, pensó que el técnico Luis Enrique se iba a quedar tras la eliminación en Octavos del Mundial a manos de Marruecos (0-0, 3-0 en penales), porque estaba al mando de «una selección que está cambiando de generación» y que para el próximo Mundial «va a dar mucho más».
Aunque recibió con agrado a quien lo sustituirá al mando de La Roja, Luis de la Fuente, quien estaba a cargo del equipo nacional sub-21, porque «es un cambio en la forma de ver el futbol».
«Tenemos un gran grupo con muchísimo talento: Pedri, Gavi son chicos que tienen todo lo mejor por delante; Rodri como número seis; los centrales son todos jóvenes también, Nico (Williams) es bestial», aseguró.
«Creo que nos falta simplemente adaptar un poquito ese futbol de posesión y control al futbol moderno, que es más transición, nada más, pero sin romper nuestra forma de ver el futbol, de jugar, porque eso nos ha dado el Mundial y dos Eurocopas», apuntó.
Mundialista en Alemania 2006, Salgado pidió a los españoles evitar las comparaciones con la generación dorada que alzó la Copa del Mundo en Sudáfrica-2010 y las Eurocopas de 2008 y 2012.
«Siempre estamos comparando a todo el mundo con Xavi, Iniesta, Xabi Alonso, y creo que todos los jugadores son diferentes y tenemos que trabajar con el talento que tenemos ahora, sin comparar a nadie», cerró.