FILADELFIA — ¿Cuál es el rol de Ranger Suárez en los Filis? ¿Abridor, como lo fue durante toda la campaña regular del 2022? ¿Relevista intermedio, como fue el caso del Juego 1 de la Serie Mundial el viernes contra los Astros? ¿O es cerrador, papel que cumplió el 23 de octubre para salvar a Filadelfia en la novena entrada del Juego 5 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional ante los Padres para sellar el primer banderín de dicho circuito para los Filis desde el 2009?
La respuesta, por supuesto, es que el zurdo venezolano ha sabido lanzar en cualquiera de los tres roles en esta postemporada, como lo ha hecho a lo largo de sus cinco años en Grandes Ligas.
“Pues sí, no ves a menudo a este tipo de (lanzadores)”, dijo el manager de los Filis, Rob Thomson, cuya escuadra se encuentra empatada 1-1 con los Astros en la Serie Mundial del 2022. “Es como que está tirando en su patio. Está divirtiéndose”.
Muchos de los compañeros de equipo de Suárez han hecho eco a lo expresado por Thomson, en los dos sentidos: El joven de 27 años no le huye a ninguna responsabilidad en el montículo, fungiendo en el papel que se le asigne—incluyendo cambios de rol en medio de una campaña o una postemporada—y tampoco deja que la magnitud de la situación lo afecte.
El mejor ejemplo de ello fue aquel Juego 5 de la SCLN frente a los Padres. Los relevistas del momento de Filadelfia—el dominicano Seranthony Domínguez, el venezolano José Alvarado y David Robertson—ya habían lanzado, con el último descontrolado y regalando dos bases en el noveno inning tras el dramático jonrón de Bryce Harper en el octavo y los Filis buscando terminar de eliminar a San Diego. Tras haber abierto y ganado el Juego 3 de la serie dos días antes (5.0 entradas, dos carreras limpias, 68 pitcheos), Suárez fue el hombre indicado para apagar el fuego con dos a bordo y un solo out.
Con apenas dos lanzamientos, Suárez sacó los dos outs restantes y puso a gozar a la multitud del Citizens Bank Park.
“Creo que no hay momento que le quede grande”, dijo el receptor de los Filis, J.T. Realmuto. “Cada vez que recibe la bola, simplemente está pitchando. Está jugando béisbol, está divirtiéndose”.
Todo el mundo sabe que los Filis ajustaron su rotación para la Serie Mundial, poniendo a abrir Noah Syndergaard el lunes en el Juego 3 en lugar de Suárez, a quien le tocaría normalmente. ¿Por qué? Porque el oriundo de Piedecuesta no sólo salvó el partido decisivo vs. los Padres, sino también en el Juego 1 de este Clásico de Otoño sacó dos outs importantes (ponche del cubano Yordan Álvarez, rodado al montículo de Alex Bregman) en la victoria de Filadelfia en entradas extras. Por supuesto, necesitará ahora el día extra de descanso y abrirá el Juego 4 del martes.
“La situación, el rol… no le importa”, dijo Thomson. “Simplemente va a salir a hacer lo suyo y pitchar”.
Durante la gran mayoría de su carrera en liga menor, Suárez fue abridor en el sistema de los Filis. Fue relevista intermedio en su primera temporada completa en las Mayores en el 2019, antes de una campaña prácticamente perdida por el COVID-19 en el 2020 (10 entradas, nueve carreras limpias). El año pasado, dividió su tiempo entre los roles de abridor y relevista. En el 2022, terminó de establecerse como abridor. Como tal, tuvo marca de 10-7 con efectividad de 3.65 en la campaña regular, incluyendo promedio de carreras limpias de 2.95 después del Juego de Estrellas.
En la presente postemporada, Suárez ha permitido seis hits y tres carreras (dos limpias, efectividad de 1.86) en 9.2 episodios, con nueve ponches y cinco bases por bolas. Y claro, ha hecho eso en una ya amplia variedad de papeles, algo ya de costumbre para él.
“Ha sido exitoso para nosotros donde sea que lo hemos puesto”, comentó Realmuto. “Es un muchacho que cuando entra al juego, todo el equipo tiene la confianza de que el momento no va a ser demasiado grande para él”.