HENDERSON, Nevada EEUU (AP) — Rich Bisaccia acababa de completar su primer partido como entrenador interino de los Raiders de Las Vegas a mediados de octubre, una victoria como visitante 34-24 sobre los Broncos.
El corredor estelar del equipo describió el ambiente junto a la línea de banda.
“Era como que no había ansiedad. Fue extraño. Es como si todos estuvieran en calma. No había nadie insultándote o volviéndose loco contra los árbitros — nada de eso”, dijo Jacobs, haciendo referencia a las diferencias entre Bisaccia y el exentrenador Jon Gruden.
Hay otra diferencia notable entre los dos. Bisaccia consiguió algo que Gruden no pudo desde que regresó a entrenar en 2018: los Raiders van a jugar los playoffs.
El equipo de Las Vegas tuvo su cuota de serios problemas extradeportivos esta temporada. Gruden renunció luego de un escándalo por un email; Henry Ruggs III fue cortado después de que la policía lo acusó de haber chocado su vehículo mientras estaba ebrio, provocando la muerte de una mujer; Damon Arnette también salió del equipo después de publicar un video en redes, en el que se le veía amenazando a alguien con un arma, y Nate Hobbs fue arrestado la semana pasada por manejar bajo el influjo de alguna sustancia.
Sin embargo, los Raiders coronaron una carrera inesperada hacia los playoffs con una victoria de último segundo sobre los Chargers de Los Ángeles para asegurar su boleto.
“Nuestro cuerpo de entrenadores completo siente un gran orgullo por el equipo y por la forma en la que compitió”, dijo Bisaccia después de la victoria del domingo por 35-32 sobre Los Ángeles. “Esto es lo que tratamos de predicar cada día. Buscamos la manera de mejorar un poco, de progresar cuando termina el día”.
Y sin ansiedad, aparentemente.
Es algo complicado para un equipo que en medio de sus vicisitudes se tambaleaba con marca de 1-5. Durante ese tramo, fue superado en puntos 194-103. Y una de esas derrotas fue en casa contra el equipo al que enfrentará en la primera ronda, los Bengals de Cincinnati.
Pero el equipo al que recibirán los Bengals el sábado, es muy diferente al que derrotaron 32-13 el 21 de noviembre.
Y todo comienza desde arriba.
Bisaccia tiene motivos para aspirar a que le quiten la etiqueta de interino a su puesto. Le ha dado sentido de calma a un equipo que, además de tener problemas extradeportivos, superó lesiones y pruebas positivas a COVID-19.
Los Raiders están en postemporada por primera vez desde la campaña 20016, y solo por segunda vez desde que representaron a la AFC en el Super Bowl de la temporada 2002.
Esperan que su racha de cuatro victorias les dé el combustible necesario para trabajar en una semana corta a fin de cobrar venganza contra Cincinnati y seguir con vida.
“Cuando piensas en todo lo que este equipo ha pasado, lo que han superado para estar en esta posición, la vida les ha dado definitivamente muchos caminos”, dijo Charles Woodson a The Associated Press después del encuentro del domingo. “Nadie les deba una oportunidad de llegar a los playoffs”.
Nadie, excepto Bisaccia.