MONTEVIDEO (AP) — Después de días de incertidumbre que insinuaron el fin de un ciclo de 15 años, Óscar Tabárez sigue como técnico de Uruguay.
Pero la continuidad del “Maestro” Tabárez no está garantizada al encarar dos partidos complicados para las aspiraciones de Uruguay de clasificar a la Copa Mundial.
En la quinta ubicación con 16 puntos — en zona de repechaje — la Celeste primero recibe el viernes a la invicta Argentina y luego tendrá que visitar a una mejorada Bolivia en la altura de La Paz.
La Celeste recibió duras palizas en sus dos últimas presentaciones — derrotas 3-0 ante Argentina en Buenos Aires y 4-1 contra Brasil en Manaos — que amenazaron con poner fin al ciclo del veterano entrenador. Según trascendió, el apoyo de sus dirigidos evitaron su despido.
Sobre las críticas a su conducción, Tabárez se mostró confiado y desafiante: “No pienso en eso, en mi interior me cuestiono mucho más que cualquiera que lo haga de afuera”, zanjó en una conferencia de prensa durante la semana.
La gran duda de la Albiceleste gira en torno a la participación de Messi. El astro se ausentó en los dos últimos partidos del Paris Saint-Germain debido a una molestia en la rodilla y en los isquiotibiales de la pierna izquierda. Leandro Paredes, también del PSG y otra pieza fija en el equipo de Scaloni, fue descartado por un desgarro en el cuádriceps derecho.
En la víspera del partido en Montevideo, Scaloni afirmó que Messi “en principio está a disposición”.
“Uruguay es un partido recontra difícil, un rival que a pesar de las bajas, juega de local y está obligado a sumar puntos por la posición en la que está en la tabla”, añadió el estratega argentino.
El encuentro se jugará en el estadio del club Peñarol, el Campeón del Siglo, en las afueras de Montevideo, donde las autoridades sanitarias permitieron un aforo del 75%. Se jugará con entradas agotadas.
Además de tener que enfrentar al vigente campeón de la Copa América y que marcha en el segundo lugar de las eliminatorias con 25 puntos, la Celeste debe sortear ocho bajas de jugadores importantes debido a lesiones, destacándose Edinson Cavani, Federico Valverde, Ronald Araújo, Giorgian de Arrascaeta y Darwin Núñez.
“Esta generación mal acostumbró a los uruguayos”, manifestó el goleador histórico de Uruguay, Luis Suárez, al referirse al momento de su equipo. “Hay que tener memoria y lo difícil que fue construir este proceso”.
Evocaba el campeonato de la Copa América de 2011 y las semifinales del Mundial de 2010. El debut de Suárez con la selección coincidió con el inicio de la segunda etapa de Tabárez como timonel, justo después que el equipo quedó fuera del Mundial de 2006.
Las estadísticas favorecen ampliamente a la Argentina, que sin embargo ha tenido más dificultades para ganar en Montevideo.
En la próxima jornada Uruguay subirá a la altura boliviana y Argentina recibirá a Brasil, uno de los partidos más esperados de estas eliminatorias sudamericanas.
Victorias sucesivas podrían certificar la clasificación de Argentina con uno de los cuatro boletos directos de Sudamérica para Qatar.