PARÍS (AP) — Si el Paris Saint-Germain sigue a flote en la Liga de Campeones, Keylor Navas carga con mucho del crédito.
El arquero costarricense contabilizó 18 atajadas en dos partidos del campeonato europeo. Pero el club ya no es dueño de su propio destino en la liga francesa.
Ello obedece a que el vigente campeón marcha tres puntos detrás del líder Lille, con siete fechas por disputar, tras la derrota en casa contra Lille el pasado fin de semana.
Lille podría sacar una ventaja provisional de seis puntos si vence a Metz el viernes. El PSG afronta una visita a Estrasburgo, un equipo de pierna fuerte, al día siguiente.
Incluso con su nivel superlativo, Navas no pudo impedir la caída ante Lille. Pero el que el PSG siga en carrera ha sido por obra y gracia del tico.
Los actuales campeones hubieran perdido más de ocho partidos — su mayor cantidad en los últimos 10 años — de no haber sido por Navas.
Sus providenciales intervenciones han camuflado las deficiencias defensivas del PSG, lo cual fue muy evidente la noche del miércoles. Tapó 10 remates ante un Bayern Múnich que tuvo a maltraer al mediocampo y zaga del PSG en la ida del cruce de cuartos de final en la Champions.
Pero el PSG se las arregló para salir airoso 3-2 bajo la nieve en Múnich.
En el previo compromiso europeo, Navas repelió ocho remates en el empate 1-1 ante un Barcelona que también fue muy superior en la vuelta de la eliminatorias de octavos de final, incluyendo un penal de Lionel Messi.
Durante la fase de grupo, Navas salió al rescate en casa contra Leipzig y de visita al Manchester United, partidos que el PSG ganó pero fácilmente pudo haber perdido.
“Ya no hace falta repetir que Keylor es uno de los mejores porteros del mundo”, dijo Mauricio Pochettino, el técnico argentino del PSG. “Estamos contentos de que esté con nosotros”.
Y hace bien en estarlo.
Pese a todo su peso ofensivo, el PSG persiste en ser un equipo frágil al que le falta aplomo y cohesión.
Así se percibió ante Lille con la expulsión de su astro Neymar en la agonía del partido por una imprudente falta, todo en una jugada en la que no se disputaba el balón. El brasileño procedió a encarar al mismo jugador al que le cometió la falta en el túnel y el personal de seguridad debió intervenir para contenerle. Neymar recibió una suspensión de dos partidos, lo que le impedirá viajar a Estrasburgo y luego para el duelo en casa ante Saint-Etienne.
De todas formas, Pochettino hubiera dado descanso a Neymar ante Estrasburgo, pensando en la vuelta contra el Bayern.
Pero la falta de disciplina de Neymar — tres tarjetas rojas en sus últimos 14 partidos de la liga francesa — inquietan. El delantero brasileño fue expulsado ante el Olympique de Marsella al inicio de la temporada y recibió una suspensión de tres partidos.
En una pugna por el título que podría definirse hasta la última fecha, Pochettino necesita contar con todas sus mejores fichas, y eso no ha sido precisamente el caso con Neymar en París.
Esta será la tercera temporada en la que Neymar, propenso a lesionarse y los desplantes, dispute menos de la mitad de los 38 partidos programados.
En total, el brasileño ha participado en 65 de 145 partidos posibles en la liga desde que desembarcó en la capital francesa tras el fichaje récord por 222 millones de euros (264 millones de dólares). La máxima cantidad fue de 20 en su primera temporada
Mientras el PSG trata de persuadir tanto a Neymar como a Kylian Mbappé para que firmen renovaciones, Navas ha resultado ser uno de las mejores adquisiciones del club.
Adquirido del Real Madrid por 15 millones de euros (18 millones de dólares) hace dos años, el costarricense de 34 años de edad es garantía bajo los tres palos.