Luego de la tormenta viene la calma. Gerardo Martino tuvo razón. Rogelio Funes Mori es el futbolista que más soluciones le ofrece a México. El Mellizo anota, genera, corre. Hace todo. No es comparación, pero el argentino es el delantero que más se asemeja a Raúl Jiménez. Tampoco se tiene que elevar.
Rogelio le marcó dos tantos a Guatemala. Los chapines entraron de rebote a la Copa Oro y son actualmente uno de los países más débiles de Concacaf.
El triunfo es bueno. El 3-0 se consiguió a medio gas, pero lo importante era despertar y darle alcance a El Salvador. La Selecta son líderes del Grupo A. El domingo está en juego el primer puesto.
México entró molesto al partido. Desesperado. Carlos Salcedo cometió faltas imprudentes y tuvo roces con Alfredo Talavera. México buscó revancha tras lo acontecido con Trinidad y Tobago, pero la forma no fue la correcta. Gerardo Martino mostró enojo en la banca.
Guatemala fue animoso, hasta consiguieron dos tiros de esquina. México se mostró exasperado. El cuadro chapín entró como bombero a la Copa Oro y quiso trabar al Tricolor. Si los trinitarios fueron capaces de igualar sin anotaciones frente al llamado gigante, porqué ellos no.
Rafael Loredo tuvo todo en contra, hasta su presidente comentó horas antes que no estaba en el presupuesto ganarle a México. El juego era David contra Goliat.
El Tricolor se calentó, sobre todo Salcedo, el Titán entró fuerte a los balones divididos. El árbitro jamaiquino Daneon Parchment tuvo que enfriar al jugador de Tigres.
Entre tanto fango Rogelio Funes Mori fue el futbolista más lucido. El Mellizo le pasó un balón a Erick Gutiérrez en el área, el jugador del PSV pudo abrir el marcador, pero su tiro pasó a un costado.
La presencia de Funes Mori en el área fue sinónimo de peligro. El delantero de Rayados casi provocó un autogol.
Los minutos transcurrieron. México pudo tomar el control del juego, sin embargo, el gol se resistió.
Orbelín Pineda y Tecatito Corona tuvieron la responsabilidad de crear jugadas de peligro, pero ninguno estuvo fino.
En medio de la preocupación. Rogelio Funes Mori adormeció un balón con el pecho en el área, el Mellizo le puso potencia a su disparo y superó a Nicholas Hagen. El tanto del argentino calmó el ambiente. El Tata Martino se abrazó con su cuerpo técnico en la banca.
México se relajó, dejó de atacar y pecó de soberbio, sobre todo Héctor Herrera. El jugador del Atlético de Madrid perdió balones fáciles y erró pases de trámite.
El Tricolor quitó el pie del acelerador y esperó el entretiempo. No tuvo prisa.
Funes Mori recargó baterías y regresó a finiquitar el partido. El Mellizo recibió a placer un pase en el área. El delantero ancló el pie izquierdo en el pasto y con el derecho impactó el balón. El disparó terminó en la red.
Antes de ese tanto Rogelio con un pase de tacón generó otra opción clara, lastimosamente Orbelín Pineda no lo supo contactar.
México supo que el triunfo estaba en la bolsa. Los futbolistas volvieron a bajar la potencia. Jesús Gallardo pudo fabricar el tercer tanto, sin embargo, decidió mal en el área.
Guatemala bajó la guardia. Rafael Loredo entendió que la batalla estaba perdida y prefirió refrescar el campo y dejar que otros jugadores se mostraran.
México con poco esfuerzo le alcanzó para hacer más daño. El Chaka Rodríguez centró por su pradera derecha, Orbelín se elevó en el área y con la cabeza anotó.
Gerardo Martino refrescó el juego, tuvo tiempo de debutar a Erick Sánchez y darle minutos a Alan Pulido.